ANTONIO JOSÉ PONTE
Una carnicer a del barrio chino de la Habana, un ba o de mujeres en un aeropuerto, un lugar que s lo existe cuando en l se cruzan dos trenes o una extra a ciudad bajo tierra son los lugares extra os e imprecisos a los que nos arrastran estos cuentos, en una Cuba estremecida por las fracturas e incertidumbres de su periodo postsovi tico. Sitios apenas ubicados, pero marcados por la imposibilidad de salida. Lugares que habitan individuos y tribus desterrados de la historia: estudiantes cubanos reci n llegados de lo que fue la Uni n Sovi tica, vagabundos habaneros o mujeres que buscan extraviarse del mapa.